El Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro de la Ciudad de México dio a conocer que, gracias a su programa preventivo “Salvemos Vidas”, se logró contener a 104 personas que intentaron atentar contra su vida o presentaban crisis emocionales severas durante este año en las instalaciones del transporte capitalino.
El Metro es reconocido como uno de los lugares con mayor afluencia de usuarios en la capital, lo que también lo convierte en un espacio donde con frecuencia se registran casos de personas en riesgo emocional.
La intervención temprana del personal especializado ha sido clave para abordar estas situaciones dentro de la red.
El programa “Salvemos Vidas”, implementado por el STC desde 2016, tiene como objetivo principal proporcionar atención inmediata a personas en crisis, además de ofrecerles atención psicológica personalizada, apoyo para reunirse con sus familiares e incluso coordinaciones para traslados a unidades especializadas cuando la situación lo requiere.
Desde su inicio, la estrategia ha permitido apoyar a más de 800 personas, quienes habrían estado en riesgo de atentar contra su vida dentro del sistema de transporte.
El año pasado —alrededor de 2024— el promedio anual de atenciones del programa era de 97 casos, por lo que el número de este año representa un leve incremento.
La atención no solo se limita a responder a emergencias, sino que también incluye acciones de prevención. El personal del programa capacita a agentes de seguridad, incluida la Policía Auxiliar y la Policía Bancaria e Industrial, así como al personal operativo del Metro, para identificar señales de riesgo, ofrecer contención emocional y gestionar de manera adecuada cada caso.
Además, el Metro instaló módulos informativos itinerantes en diversas estaciones y mantiene un módulo fijo de atención psicológica en la estación Juárez, Línea 3, disponible en horario diurno para brindar acompañamiento a usuarios que lo requieran.
Autoridades del STC resaltan la importancia de que este tipo de programas no solo sigan funcionando, sino que se fortalezcan, con el objetivo de salvaguardar la integridad emocional y física de las personas que transitan diariamente por una de las redes de transporte más grandes del país.
