La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, celebró este jueves la reducción del impuesto a las remesas del 5% al 3.5%, aprobada en la Cámara de Representantes de Estados Unidos como parte del paquete presupuestal, y aseguró que su gobierno continuará trabajando para que dicha carga desaparezca por completo.
Después de que el pleno de Cámara de Representantes norteamericana aprobara el plan fiscal y gastos del presidente Donald Trump, incluido dicho impuesto reducido, la mandataria advirtió que seguirá trabajando en el tema.
“Los paisanos estuvieron enviando cartas, correos electrónicos y posteando en las redes, y vamos a seguir trabajando sobre este tema, para que, pues no haya ningún impuesto a los aranceles y en particular con México, pues porque además hay un convenio que establece que no debe cobrarse dos veces el impuesto, pero es bueno, por lo pronto, que haya bajado de cinco a 3.5”, expuso.
La titular del Ejecutivo federal señaló que el siguiente paso será acercarse a los senadores republicanos y demócratas de Estados Unidos, para explicar por qué no es bueno dicho gravamen.
“Recuerden que esta reducción no solamente es importante para México, sino que hay países de Centroamérica que las remesas representan el 20% del Producto Interno Bruto (PIB), y nuestro caso pues es alrededor del 3%.
“Entonces es importante para todos los países, incluso para India, pero en realidad México es el único que hemos estado pues hablando con congresistas, haciendo nuestro trabajo con organizaciones en Estados Unidos”, resaltó.
Sheinbaum Pardo resaltó el trabajo del embajador de México en Estados Unidos, Esteban Moctezuma, y a los senadores de la República que se trasladaron a territorio estadounidense, para que se llevara a cabo dicha reducción.
“Por lo pronto la tasa del impuesto de las remesas es una disminución del cinco al 3.5%, de todas maneras, nosotros no queremos que haya impuesto, entonces vamos a seguir trabajando, informando a todas y todos, pero es algo que pues vale la pena reconocer y vamos a seguir trabajando para que no haya ningún impuesto a las remesas que envían nuestros paisanos a sus familias en México”, agregó.
La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó la madrugada del jueves 22 de mayo un paquete de reformas fiscales promovido por el presidente Donald Trump, que incluye un nuevo impuesto del 3.5 por ciento a las remesas enviadas por personas extranjeras, sin ciudadanía ni residencia permanente legal.
La medida, que forma parte de un conjunto más amplio de modificaciones al sistema tributario y de gasto social del país, aún debe ser ratificada por el Senado, también de mayoría republicana.





