Investigadores del Instituto de Ingeniería de la UNAM aseguran que la llamada falla de Plateros-Mixcoac es la responsable de los microsismos que han ocurrido al poniente de la Ciudad de México.
De acuerdo con una reciente investigación realizada con datos satelitales, pudieron identificar la falla la cual no había había sido comprobada.
Debido a los 23 sismos ocurridos entre el 3 de diciembre del 2023 y el 10 de enero de 2024 en las alcaldías Magdalena Contreras y Álvaro Obregón, tuvieron una profundidad menor a los 1.4 kilómetros.
Estos sismos registrados en ese periodo, han causado graves daños en algunos inmuebles del poniente de la Ciudad de México, por ello el Instituto de Ingeniería de la UNAM realizó una investigación sobre estos movimientos telúricos.
El estudio reveló que los sismos con epicentro en el valle de México no son nuevos, pues existe un registro de “enjambres de sismos” en 1950 y 1956, como los que vivió la Ciudad de México en diciembre del 2023, los cuales también también ocurrieron en la zona de Mixcoac.
Sin embargo surgieron nuevas hipótesis sobre el reciente enjambre de sismos ocurridos en el poniente de la capital, desde el hundimiento del valle de México hasta la influencia de temblores ocurridos en las costas del Pacífico.
Para idenrificar el motivo por el cual ocurren los microsismos, los científicos recopilaron datos satelitales para ubicar deslizamientos en la zona de Mixcoac.
De a cuerdo al análisis, los investigadores señalaron que existe una falla, la cual ya habían sugerido, pero no había sido identificada debidamente:
El patrón es similar al desplazamiento permanente generado por una falla de tipo normal, la cual puede ser independiente y que no había sido identificada antes, pero sí sugerida por muchos autores, o quizás es parte de un segmento no identificado de las fallas reportadas en la literatura técnica.
La falla fue bautizada por los científicos de la UNAM como falla de Plateros-Mixcoac:
“Este hallazgo, al cual llamaremos la falla Plateros-Mixcoac, ha sido de alguna forma propuesto en conversaciones con académicos e inclusive se sugiere en el mapa de riesgos de la Ciudad de México, pero nunca se había sido confirmado. Lo hemos corroborado de manera preliminar mediante: a) epicentros en la zona norte de la falla Plateros-Mixcoac y b) desplazamientos verticales o hundimientos cuyo patrón es el de una falla normal”.
Al respecto, los científicos dejaron claro que aún hay mucho por investigar, pues no se ha cuantificado el potencial peligro de la falla de Plateros-Mixcoac:
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